Las restricciones a la movilidad por nueve dÃas en el mes de mayo retrajeron significativamente las ventas financiadas, llevándolas a niveles de abril de 2020, uno de los peores registros desde que comenzó la pandemia.
Los impactos económicos de las últimas restricciones a la circulación, dispuestas por el Gobierno para contener la propagación de la segunda ola de contagios, ya empiezan a verse con nitidez.
Durante el mes de mayo los consumos con tarjetas se desplomaron un 30%, y alcanzaron un equiparable a los registros mÃnimos de abril de 2020, mes en el que comenzó a verse el derrumbe causado por el inicio de la cuarentena estricta.
“Las restricciones a la movilidad de mayo retrajeron significativamente el consumo con tarjetas llevándolo a una caÃda real de 30% interanual, y regresándolo a niveles de abril de 2020, uno de los peores registros desde que comenzó la pandemia”, precisa un informe del BBVA Research, sobre seguimiento del consumo en tiempo real.
Los rubros más afectados por la nueva fase estricta fueron los relacionados a la movilidad y a las actividades no esenciales.
En particular, durante la última semana de mayo la baja promedio en hogar, moda, ocio y viajes se ubicó entre 50% y 60% por debajo de la semana anterior.
Automoción, deportes y juguetes, tecnologÃa y transporte se retrajeron alrededor de 35% semanal; alojamiento, bares y restaurantes, combustibles, construcción, cuidado y belleza apuntaron caÃdas entre 20% y 30% en el mismo lapso.
El comportamiento captado por este indicador de gastos en tiempo real coincidió con los datos de compras en supermercados de marzo último dados a conocer por el Indec, que marcaron una caÃda del 8,8%.
Para el segundo trimestre, el mencionado banco pronostica una leve baja en el nivel de consumos comparado con los registros previos al inicio de la pandemia.
Ante la caÃda de la actividad económica, mucha gente se quedó sin capacidad de gastar y le puso un candado a la tarjeta, por lo que se limitó a seguir refinanciando los saldos impagos, pero mucho de lo que se hacÃa con tarjeta, como viajes, ropa y salidas, fue para comprar alimentos.
Entonces hubo quienes decidieron devolverla o dar de baja al plástico como una forma de no gastar.
Otro de los factores es una reducción de cantidad de tarjetas por persona. Quien antes tenÃa tres tarjetas de bancos distintos, para bajar los costos ahora consolidó todas en un mismo banco.