La Liga Sudamericana dará inicio en 2020 y desde el Jardín de la República buscan un lugar para la región.
En busca de fortalecer el deporte en todas las regiones, bajo la tutela de la World Rugby, comenzará a desarrollarse en 2020 la Liga Sudamericana de Rugby, que contará con la presencia de ocho franquicias profesionales en diferentes puntos del continente.
La competencia tendrá dos equipos de Argentina, dos de Brasil, dos de Uruguay, uno de Chile y otro de Paraguay, con la idea de ampliar en un futuro en Perú, Bolivia y Colombia. Desde la Unión Argentina de Rugby aún no definieron dónde estarán ubicadas esas franquicias, pero la puja por tenerlas ya comenzó.
Teniendo en cuenta que Jaguares, el equipo profesional que compite en el Super Rugby, juega como local en Buenos Aires, la idea sería que los nuevos equipos no estén en esa región, aunque desde la URBA quieren un lugar como sea. Pero no son los únicos, ya que en Rosario, Córdoba, Cuyo y Tucumán también quieren formar parte del rugby profesional.
“La Unión de Rugby de Tucumán informa que se encuentra trabajando junto a grupos de inversores para dar forma a la franquicia de nuestra provincia con el objetivo de formar parte de la Liga Sudamericana de Rugby”, dice el comunicado emitido desde la URT. “Nos encontramos a la espera de que se expliciten las condiciones y requisitos para poder presentar la propuesta”, agregan.
En los últimos años, bajo el mandato de Jorge Juárez Chico, Tucumán perdió mucho terreno en la mesa chica de la UAR. Luego de tener un presidente y dos vicepresidentes, desde hace más de un año que no hay un tucumano en la toma de decisiones en el plano nacional. Por tal motivo, los dirigentes de la URT buscan volver a ganar terreno y obtener una franquicia que será de vital importancia para la región.
La llegada de un equipo tucumano al profesionalismo significa potenciar al NOA, tanto a sus jugadores como a sus entrenadores, quienes tendrán la posibilidad de ser arrendados sin la necesidad de salir de la provincia, o de la región, en el caso de los salteños o santiagueños. Asimismo, la llegada de una franquicia vendrá de la mano con puestos de trabajo en los staff técnicos, cuerpo médico, en las áreas de comunicación y marketing y muchos otros sectores que hoy no están explotados.
En las próximas semanas se conocerán las condiciones que deberán tener para obtener la franquicia. Tucumán se encuentra ante la posibilidad de un crecimiento a nivel juego, a nivel institucional y a nivel profesionalismo. La puja por un lugar no será sencilla, ya que otras grandes regiones también quieren su lugar. Es el momento en el que los dirigentes de la URT no tienen que dormir y buscar que la Unión Argentina de Rugby muestre un poco de federalismo, algo que se vio muy poco desde que asumió el sanjuanino Marcelo Rodríguez, quien volvió a centrar todo en Buenos Aires, como ocurría en las décadas pasadas.